Así que vamos a pararle el tiempo al tiempo,
para que vea lo que jode
ver pasar tu vida por delante
y no poder mover un dedo.
Y vamos a sacarle las pilas,
para vivir sin prisa pero con pausa
y así poder mirarte
y remirate, y no cansarme.
Porque
nunca, nunca, nunca
me
cansaré
de mirarte.